17 enero 2012

En busca del gato perdido II: el desenlace

En serio, nunca dejaré de sorprenderme con mis aventuras en intenné. Desde que navego por la red he vivido situaciones raras, raras, raras, y más porque me encanta liarla y meterme en cada embolao tremendo xD

Hace unos días lancé una búsqueda al aire (o a la red): quería encontrar el paradero actual del niño francés de 12 años que  canta-maullaba en un vídeo.  Tan sólo conocía su nombre, tomado del vídeo de youtube: Pascal Sevran. Para dar con él necesitaba la colaboración ciudadana de los lectores de mi blog, y vuestra respuesta no se hizo esperar: fue colgar el post y comenzar una caza y captura online que ni los del Ceseí.

Y así fue como al rato de publicar el cartel de "se busca" me llegó vía msn una fotografía de un maromazo impresionante junto con una frase: -¿te suena?. Buah. Era él, con unos 15 años más. Se trataba de una foto de estudio que paso a mostraros ipso facto:




Cuando me recuperé de la impresión, mi amigo (el que me pasó la foto, cuya identidad prefiere mantener en el iconomato) me comentó que es normal que me costase encontrarle, puesto que su nombre no es Pascal Sevran, sino Régis Mengus

Y de esta forma continué mi investigación, buscando epiteliales y demás pistas en su web personal. Descubrí que es cantante de ópera (y bastante bueno), tal y como se puede apreciar en algunos vídeos de youtube. Que ha trabajado en Las Bodas de Fígaro, en Carmen, en Hamlet, en Cyrano y Roxanne o en Verónica
Y que está buenorro y que será mi futuro marido.

Pues bien, una vez localizado (y apuntada la dirección de su agencia en París) continué con mi periplo pavoso y me dispuse a encontrar la mejor manera de conquistarle. Es un artista famoso e importante, así que no valía cualquier cosa. ¿Una carta? Pues no, porque a pesar de haber sido yo dotada de una retórica exquisita y seductora... no tengo ni papa de francés escrito, ejem. ¿Un regalo? Para qué, si debe estar forrao. 

Y así fue como un colega me dio la solución: íbamos a grabar un vídeo para mi Régis versionando su Duo des Chats. Nos pusimos manos a la obra y en un plis plas ya teníamos localizado y convencido a otro chaval, músico y pianista, que aportaría la parte instrumental al vídeo. Le conseguimos la partitura de la obra y todo, eh, que somos profesionales de la farándula. También convencí a una amiga traductora para que escribiese en francés el mail explicativo, porque no podemos enviar el vídeo sin decir nada más ni dar mis datos personales para que, cuando se enamore locamente de mí, pueda encontrarme. 


Y aquí que nos tenéis a los tres, ensayando. 
Pienso ser el gatico más mono del universo, vamos, que espero que con mi segundo o tercer miauuuu mi Régis se enternezca y decida pasar el resto de su vida conmigo.




Porcier, lo único que no fui capaz de encontrar fue su fareborn. Tenemos el del otro gato, el rubito (cuando quieras te lo paso, Pau :P) pero no el de mi moreno. Lo dejo caer por si alguien se aburre y quiere seguir investigando ;)

Y nada más, deseadme suerte. Que está claro que en las cuestiones serias soy un desastre, pero en las chorradas siempre consigo superarme e intuyo que al final con la tontería el pobre chaval va a aparecer de verdad y me va a mandar a freír monas xDDDDD



¡Besotes y gracias por la colaboración!


12 enero 2012

En busca del gato perdido

Todo empezó como una broma. Mi querida Sil puso en su blog un vídeo que me encanta, en el que dos niños con una voz increíble cantan Duetto buffo di due gatti, de Gioachino Rossini.
Tal y como bien dice Sil, aunque los dos lo hagan de maravilla... el que le da toda la gracia al vídeo es el niño moreno. Y yo me quedé encandilada con esa risilla, ese movimiento de ceja, esos miewwwww tan simpáticos.
De esta forma y haciendo gala de mi pavez supina, le dejé un comentario a mi amiga que decía  tal que así:

"La Rizos dijo...

Buah! de todas las piezas que has puesto, esta siempre será mi favorita :D
Y ADORO al chaval moreno. Espero que me llame cuando cumpla 18"



A lo que ella me respondió diciendo que dado que ese vídeo tiene ya sus añitos, el chaval puede estar entrando en la treintena perfectamente.

Y fue entonces cuando mi pavez llegó al extremo y, entre risas, Sil me animó a encontrarle en las redes sociales dándome su nombre: Pascal Sevran. Como dato supletorio, "ten en cuenta que ningún otro Pascal Sevran de fareborn será fan de los "Petits Chanteurs de la Croix de Boix", el coro en el que cantaba cuando era tierno infante. 

Y allí que me vi yo anoche investigando entre todos los Pascalses Sevranes de la red. He descubierto que hubo un humorista francés con ese nombre que murió en 2008, pero que no podría tratarse de mi hombre puesto que rozaba los 50. También me encontré con algún niñato emo, (los descarté al instante puesto que mi adorado Pascal no puede ser emo) alguna cuenta sin foto ni datos y alguna que otra pista falsa. Pero ni rastro de mi gatico.


Por esa razón estoy aquí, amiguitos. Para recurrir a la colaboración ciudadana y ver si entre todos conseguimos localizarle. "¿Para qué?", me diréis. Pues aún no lo tengo muy claro... y más teniendo en cuenta que es francés y que yo de franchute controlo bien poquito xDDDD

Pero oye, he visto mil casos por intenné de padres que encuentran a las hijas que dieron en adopción y de mujeres que encuentran objetos perdidos... ¡yo no voy a ser menos!


Así que ya sabes, querid@ ovejos@. Si alguna vez te topas con este chico, o conoces a alguien que le conozca, o eres un apasionado de los coros de niños franceses que maúllan y tienes más datos que yo acerca de su paradero... ¡te necesito!

Consigamos que este sea el primer gran logro cooperativo de Una de Rizos... Hagámoslo.




07 enero 2012

Regalos que me hizo la Navidad II

Somos muy poco agradecidos con la vida, en general, y se nos suele olvidar valorar lo que tenemos y vivimos. Por eso cada año me gusta hacer balance al llegar Enero, y recordar esos momentos y vivencias que hicieron mi Diciembre especial para escribirlos en mi blog. Así queda constancia de que, aunque soy una quejica, todo es vicio :P

Os dejo con los regalos de mi Diciembre de 2011:

- Las reuniones familiares con mi tío/ tía /primo Rubén. Es un encanto de niño que me tiene camelada, y cada vez que viene a comer a casa me lo paso pipa. Aunque sea un pequeño mamoncete repipi de 4 años que me regaña cuando cuento con los dedos porque no se cuenta con los dedos, sino con la mente.

- Volver a ver a Jesús, mi amigo el que vive en Londres, aunque hayan sido sólo dos días. Siempre es un placer volver a reunir a mi grupo de toda la vida en fechas importantes y comprobar que, por mucho tiempo que pase, seguimos siendo los mismos.

-Lo genial que me lo pasé la noche del cumpleaños de Alberto. Este año no me caí ni me hice ningún esguince, así que encima hubo novedades agradables xD Hubo de todo: reencuentros poco agradables que al final me resbalan cual gotas de agua sobre pato, risas, sangría con palitos, confesiones... Además creo que gracias a él ha comenzado un cambio significativo en mi persona: ¡me ha presentado a una rubia (que no es ni Flé ni mi Gordipé, ejem)  que me cae bien! Vamos, ¡que le estoy cogiendo cariño y todo! Milagros de la Navidad, lo llaman.

-Por qué no decirlo, todos los regalos materiales que he recibido este año. Desde luego los Reyes se han portado, ¡y eso que no he sido especialmente buena! xD Tengo un móvil nuevo que es una pasada (con intenné y todo, ya tengo whatsapp y debo decir que es un invento del demonio) y, lo más importante de todo... ¡ME HAN REGALADO UNA BATAMANTA! Ya puedo morir en paz.

-Los martes-noche de trivial en el Amsterdam. El trivial especial Navidad en el que obtuvimos la victoria gracias a nuestros conocimientos en películas estúpidas y villancicos del precámbrico.
Sentirme que estoy en el bar de siempre, con los colegas de siempre... y hacerlo un hábito. Me gustan los hábitos, me hacen sentirme segura y cómoda.

- Haber conocido un poco más a gente interesante. Y que se dé por aludid@ quien quiera xD

-La cena Navideña del Día de los Inocentes y la tarde en la que nos dimos los regalitos del Amigo Invisible. Aunque creo que ésto se me está yendo de las manos: esta navidad me han regalado ya 2 bufandas moradas, unidas a las que ya tenía xDDD ¡¡¡Moradismo, moradismo everywhere!!!

-Haberle hablado a alguien, por fin, de algo que me tenía guardado desde hace tiempo y que ya me quemaba por dentro, me quemaba por dentro, me quemaba por dentro, me quemaba por dentro.

-Haber hecho limpieza en mi vida, y haber sido capaz de sacar de ella a quien no me hace bien. Basta ya de ser políticamente correcta: me cansé. Y ahora me va mejor.

-Haber encontrado un karaoke guapísimo en Málaga al que volveré sin dudarlo en cuanto recupere mi voz xD

-La Nochevieja soriana, muy a los Rizoso Style.

-El día que pasé con algunos amigos twitteros y su familia. Fuimos a comer al Burguer Aquarium, después dimos un paseo precioso por la playa y acabamos la sobremesa tomando café al sol. Los 25 grados de temperatura del Diciembre en Málaga dan para mucho, y es una verdadera delicia. Sobre todo cuando la compañía es buena y el buen clima se une a charlas interesantes y divertidas :)

-Las fotacas tan tremendas que me hizo el fotógrafo Nacho Gutiérrez en el Fotos y Tuits 06, en el CAC de  Málaga. La temática era la Navidad, aunque la mezcla de arte moderno con renos y ovejas quedó algo surrealista xDDD Para muestra, un botón:







Nada, que no me puedo quejar. Ahora ya sólo queda prepararme para todos los regalos que me hará el 2012, que ya está pisando fuerte :)

¡Besazos para todos!

02 enero 2012

365 +1(bisiesto!)

Tienes otro año más, Bea. 

366 días que dan para mucho, lo mires por donde lo mires. No sabemos si serán los últimos (como predijeron los mayas) o si después de este año que comienza habrá muchos más... pero, a fin de cuentas, un año es un año.


En un año puedes aprender a ser más feliz con lo poco que tienes. Puedes entender que no tener trabajo te da la oportunidad de encontrarlo. Que tú puedes crearlo. Que puedes. Que podrás.
Un año promete muchas risas, algunos llantos (necesarios en tu vida tan de drama-queen), mil promesas que incumplirás y alguna promesa cumplida casi sin darte cuenta. 
En un año mentirás más de una vez y dirás la verdad con el corazón en la mano, aunque duela. Perderás algún amigo por el camino, -la vida es así- y conocerás gente interesante que te ayudará a ver lo que te rodea de otro color distinto al morado.
Un año más significa equivocarse, caerse, ponerse en pie de nuevo, volver a equivocarse, comprender, acertar. Contemplar tu rostro somnoliento en el espejo 365 mañanas, y enamorarte de tu sonrisa 5 o 6 de ellas. Odiarla el resto. Volver a mirarte en el espejo 365 noches, antes de irte a dormir, y enamorarte de tu sonrisa todas las veces.
En un año te harán cosquillas muchas personas, daño otras tantas y recibirás (espero) también muchos besos, de muchas clases diferentes. 
Te cortarás el pelo una o dos veces. Te saldrá alguna cana nueva y se unirá a las que ya tienes. Se te pronunciarán un pelín más las arruguitas junto a los ojos, de tanto reír a carcajadas. Estarás orgullosa de ello.
Te tomarás 366 yogures con calcio incorporado, 732 pastillas (sin contar aspirinas) y vete a saber cuántos Desenfrioles.  Te quejarás por tu salud en innumerables ocasiones, la mayoría de ellas por vicio. 
Harás llorar a gente que te quiere, decepcionarás a alguien, harás sonreír a desconocidos y, quizá, alguien que te aprecia se sentirá orgulloso de ti. 
Gastarás 15 botes de champú, 15 de acondicionador, 16 de espuma para el pelo, 2 frascos de colonia, 3 botes de crema hidratante, 5 desodorantes, 9 tubos de dentífrico, 2 botes de crema hidratante facial y 2 frascos de maquillaje líquido. Te comprarás 34.567 pintalabios y no gastarás ninguno.
En un año aprenderás a decir palabras inútiles en varios idiomas. Viajarás alguna vez (pocas). Te enamorarás, también pocas veces. Te cabrearás muchas veces. Respirarás hondo y contarás hasta diez. Mirarás a alguien con orgullo. Abrazarás. Dibujarás en el margen de los folios. Cantarás a pleno pulmón mientras conduces. Acariciarás. Te zamparás muchos helados de chocolate. Te mancharás.
En un año echarás de menos a los que ya no están y de más a algunos que siguen estando. Serás injusta la mayoría de las veces, y justa cuando de verdad importa. 
Harás 345.692 fotos estúpidas que colgarás en Fareborn repletas de etiquetas, y dos o tres fotografías que te guardarás para ti misma. 
Escribirás una media de 3 posts al mes en tu blog, 10 tweets al día y escucharás más o menos 8 canciones diarias en Youtube.
Engordarás 2kg. Adelgazarás 1,30kg. Volverás a engordar 2kg. Volverás a adelgazar 1,30kg. Acabarás el año más gorda y odiando las matemáticas.
Verás muchas películas y series de zombies, alguna comedia romántica y dos o tres películas de guerra que no te gustarán nada, por hacer feliz a alguien. Volverás a ver La Boda de mi mejor Amigo y terminarás llorando como siempre.
Te picarás con tus amigos al Bejeweled Blizz. Les ganarás la mayoría de las veces. Jugarás al Pro, presionada por otros. Perderás estrepitosamente.
En un año sentirás que el tiempo pasa demasiado deprisa en la mayoría de las ocasiones, pero en otras dejarás de quejarte y disfrutarás sobremanera de un maravilloso y breve instante. 
Llenarás el depósito de tu coche más o menos 11 veces, y convencerás a tu padre para que lo lleve al taller en dos o tres ocasiones. Se te olvidará comprobar el nivel del aire de las ruedas durante todo el año.
A lo largo de 366 días podrás comprender cosas que antes no comprendías, encontrar nuevas preguntas y frustrarte por no saber responderlas. Creerás que eres más madura y sabia que el año anterior, pero jamás lo suficiente.
Harás muchos regalos y recibirás otros tantos. Te gustarán todos, sea lo que sea que te regalen.
Te quemarás por culpa de sol una vez, y te pondrás capas y capas de crema protectora el resto de los días del año.
En primavera desearás que sea verano. En verano soñarás con el otoño. En otoño querrás que sea invierno. En invierno estornudarás y te cagarás en todo.



Tienes todo un año nuevo frente a ti, Bea. Ni más ni menos. 
Y estos son mis propósitos, puesto que lo único que espero del 2012 es poder vivirlo.